sábado, 18 de junio de 2011

Los divorcios y las mascotas


Me ha llamado la atención el tema de los divorcios y las mascotas. Varias veces he leído noticias en ese sentido.

Parecería increíble que una pareja en medio de un divorcio donde generalmente se discuten temas tan importantes como la guarda de los hijos, las visitas, la manutención, y luego la partición de bienes, que la pareja también discuta o no se ponga de acuerdo con relación a las mascotas y quién se quedará con ellas.

En nuestro país no he visto sentencias (hasta el momento) donde se haga referencia a las mascotas de la pareja, pero sí en los Estados Unidos, como pueden ver en los links que señalo.

Pero lo cierto es que las mascotas son parte importante de la vida de muchas personas y aveces (aunque las parejas tengan o no hijos) las mascotas son puntos de discusión.

No se me ha presentado nunca un caso así, ni en un divorcio por mutuo consentimiento ni por incompatibilidad, pero sería interesante ver primero la reacción de los jueces y segundo lo que tomaría en cuenta para decidir con quién se quedaría la mascota. Son las mascotas propiedad común de los esposos? Aquí encontré una noticia donde un Juez en Argentina entendió que las mascotas no son bienes gananciales.

Si alguien que lea este post tenga experiencia en ese sentido, ya sea en este país o en el extranjero, sería interesante conocer sobre casos y decisiones al respecto.


1 comentario:

  1. Nunca lo habría pensado, pero a fin de cuentas no me parece algo tan descabellado. Hay mascotas (sobre todo perros) que se se encariñan tanto con sus amos que no me extrañaría que aparecieran "psicólogos animales" que argumenten "daños emocionales" para las criaturas si se ven privados de la presencia de su ambiente familiar usual. En el fondo, tiene lógica que si a un niño de pocos años le afecte emocionalmente una ruptura del núcleo familiar, también suceda algo similar con un perro o un canario (a los gatos no los incluyo porque esos son unos egoístas hdp, jeje).

    No conozco casos entre mis amigos, pero conozco una pareja que tienen un perrito que se ha vuelto adoración de ambos. Muy en broma (ellos se adoran entre sí), hace poco discutían quién se quedaría con "Bob José" si se divorciaran y el debate estuvo lleno de defensas emocionales dignas de cualquier corte de custodia. :D

    ResponderEliminar